El mapa de los ruidos de la ciudad: los sevillanos soportan más de 55 decibelios en horario nocturno

Mario Daza

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10/06/2025
Actualizado a las 21:03h.

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Casi una década después de la aprobación del último mapa estratégico de ruidos de la ciudad de Sevilla, la Gerencia de Urbanismo acaba de concluir la actualización de esta radiografía sonora de la capital hispalense en la que se observa, como principal conclusión, que la problemática detectada en el año 2016 apenas ha cambiado en la actualidad. En concreto, el tráfico viario sigue siendo el principal elemento que dispara las afecciones que se soportan en la mayoría de barrios. O lo que es lo mismo, continúa siendo la causa de que gran parte de los sevillanos padezcan niveles de ruido encima de los 65 decibelios, el límite establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El documento que se someterá hoy a la aprobación por urgencia del Consejo de Gobierno de la Gerencia de Urbanismo, antes de pasar a su exposición pública y posterior refrendo en el Pleno, presenta una serie de variables que ponen el foco en las disfuncionalidades detectadas en el análisis y que serán objeto de los futuros planes municipales para corregirlas. En este sentido, concluye que un 10% de los sevillanos está sometido a niveles sonoros por encima de los 65 decibelios durante el día. Sin embargo, la cifra aumenta hasta el 25%, es decir, uno de cada cuatro ciudadanos, en horario nocturno, donde el máximo se fija en los 55 decibelios. En cuanto al alcance superficial de las afecciones en los periodos de día y de tarde, un 70% de la ciudad presenta niveles sonoros por encima de los 55 decibelios y sólo el 2% llega a superar los 75.

El análisis por distritos permite identificar que Cerro-Amate es en estos momento el que soporta una mayor problemática sonora en el conjunto de la capital hispalense. En concreto, más de 24.000 de sus vecinos se hallan expuestos a niveles por encima de los 65 decibelios. Le siguen de cerca los empadronados en Norte, Nervión, San Pablo-Santa Justa o Macarena, ya que en todos estos distritos hay más de 15.000 afectados. Como ocurría en los anteriores valores, el tráfico viario sigue siendo el principal causante de esta situación, aunque tanto en Norte como en Sur se aprecia también una influencia destacable de la actividad industrial.

En la actualización del mapa estratégico del ruido también es reseñable el escenario que se dibuja en los denominados «edificios sensibles», indicando que más del 60% de los centros sanitarios de la capital hispalense y casi la totalidad de los centros docentes superan los niveles de ruidos recomendados, tanto en los periodos de día, de tarde y de noche, siendo aquí también el tráfico viario el principal causante de los mismos.

Concretamente, las mediciones realizadas para la elaboración de este mapa coinciden en que, de los 67 centros sanitarios que se encuentran en activo en Sevilla según la Consejería de Salud, hay 40 sometidos a niveles de ruido por encima de los 60 decibelios durante el día y la tarde, una cifra que llega hasta los 50 espacios si se tienen en cuenta el conjunto de periodos. Por su parte, la Consejería de Educación advierte de la existencia de 355 centros docentes en la ciudad, de los que 350 están por encima de la barrera de los 60 decibelios, cantidad que se reduce a los 260 colegios si se tienen en cuenta los parámetros obtenidos en horario de día y de tarde.

El estudio de estos edificios sensibles por distritos, muestra que nueve de los centros sanitarios afectados están ubicados en Bellavista-La Palmera y otros tantos en Sur. Por su parte, en Macarena, San Pablo-Santa Justa o Nervión, son cuatro los espacios vinculados a esta superación de niveles de ruido. En cuanto a la situación de los centros educativos, más de 40 de los que componen este mapa se ubican en Cerro-Amate y Casco Antiguo, superándose la decena en el resto. La comparativa correspondiente a la afección de cada tipo de fuente continúa estableciendo el tráfico viario como elemento principal.

La ficha técnica de este estudio asegura que se ha analizado el conjunto del término municipal de Sevilla, dejando fuera el suelo calificado como rústico por el PGOU, así como los núcleos de Valdezorras, Aeropuerto Viejo y El Gordillo, que no cumplen con las condiciones de densidad y distancia establecidas en la normativa. También han sido excluidos el Puerto de Sevilla y el aeropuerto de San Pablo, puesto que cuentan con sus propios mapas de ruido.