el contrapunto
Socialistas al matadero sin rechistar
La expulsión de Ábalos apunta a que podría haber decidido colaborar con la justicia, como Koldo y Aldama
Sánchez huele a cadáver político
Mejor valentía que centralidad
Que el actual PSOE es una secta lo demuestra el hecho de que sus miembros estén dispuestos a ir mansamente al matadero sin rechistar. Como en Waco. La inmensa mayoría de los cargos electos y prácticamente todos los que tienen mando el plaza guardan ... un silencio atronador ante los escándalos que acabarán pagando con sus cabezas, salvo Emiliano García Page, que se atreve a protestar aunque luego evite actuar para lograr que las cosas cambien. Zapatero recuperó el poder enarbolando la bandera del guerracivilismo y lo aprovechó para hacer lucrativos negocios con la narcodictadura venezolana, pero Pedro Sánchez fue más lejos al levantar un muro infranqueable divisor de las dos Españas: la que le rinde culto a él, que ha resultado ser un foco de corrupción sin precedentes en la historia reciente, y la fachosfera donde moramos todos cuantos osamos criticar sus mentiras, traiciones, abusos y encubrimientos. En medio de esos dos bloques se sitúa una pequeña aunque decisiva facción de parásitos antisistema integrada por los separatistas vascos y catalanes que van a lo suyo y la extrema izquierda populista que jamás se ha visto en otra, decidida a sostener a este presidente a cualquier precio en la certeza de que no hallarán otro más dispuesto a ceder a sus exigencias.
Sánchez ha decidido atornillarse a la poltrona y resistir, caiga quien caiga, con tal de que no sea él. Pretende repetir la jugada de 2023 y lograr que sean sus candidatos a las municipales y autonómicas quienes absorban el impacto de la indignación causada en la ciudadana por la cloaca que va destapando la UCO, empezando por su fiel María Jesús Montero, sobre cuya figura pende la sombra de un dossier comprometedor y que va directa al descalabro en Andalucía, tal como desvelaba la encuesta publicada ayer por ABC. El caudillo sabe que su legado será tierra quemada y sembrada de sal, pero le resbala. Tiene cosas más urgentes en las que pensar: cómo salvar a su esposa, a punto de sentarse en el banquillo, a su hermanísimo, que ya lo está, o cómo salvarse a sí mismo de las informaciones que obran en poder de Aldama, Koldo y Ábalos, cuya súbita expulsión del partido apunta a que podría haber decidido colaborar con la justicia en aras de aliviar su oscuro horizonte penal. Cerdán ha tenido todo el fin de semana para darle a la trituradora, amparado en su condición de aforado, aunque se habrá guardado algo por si todo lo demás falla. Y fallará. La Guardia Civil hace muy bien su trabajo y cuenta con ingentes cantidades de documentos aportados por los que ya han cantado. El futuro de Sánchez pende de un milagro o de un error clamoroso por parte de sus rivales. Y mientras el barco se hunde, la banda de palmeros sigue cobrando por cantar sus glorias en RTVE.
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