Los tacos de las botas, detrás del aumento de las lesiones de futbolistas
Fútbol
Los expertos advierten del importante aumento de problemas físicos que sufren los jugadores debido a su apuesta por un calzado inadecuado
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Casi 75 futbolistas de Primera división no podrán disputar la 9ª jornada de Liga, que se iniciaba este viernes, por diferentes problemas físicos, un número muy elevado de bajas que trae de cabeza a entrenadores, médicos, preparadores físicos, dietistas y fisioterapeutas, que buscan los ... motivos y, sobre todo, la forma de prevenirlos.
Pretemporadas inadecuadas que anteponen intereses comerciales a una correcta preparación; un calendario apretado con numerosas competiciones nacionales, internacionales y de selección; la decisión de alargar los encuentros por las pérdidas de tiempo; o los problemas derivados de jugar en situaciones extremas de calor son algunas de las causas que los especialistas apuntan como claves del estallido de lesiones que se está viviendo esta temporada. No obstante, una nueva corriente también señala a la inadecuada elección de la bota por parte de los futbolistas y, sobre todo, de los tacos que ponen en ellas.
«Los equipos profesionales van una hora y media antes al estadio para ver cómo está el terreno de juego. Y según cómo esté te pones unos tacos u otros», explica a este diario Alfredo Argensó, excancerbero del Espanyol y director de la escuela de porteros que lleva su nombre. Y detalla: «Cuanto más largo sea el taco, más posibilidad de lesión. Los porteros y defensas siempre van con tacos de aluminio para evitar resbalar, los centrocampistas suelen llevarlos mixtos (algunos de aluminio y otros de fibra) y los delanteros de fibra, que son más cómodos, pero resbalas más».
Los expertos, y sobre todo los podólogos, advierten que si el campo no tiene un buen mantenimiento y carece de amortiguación se deben utilizar botas multitaco, mientras que las botas con tacos de aluminio o mixtas solo deben ser utilizadas en campos con un correcto mantenimiento. «Siempre se debe priorizar el concepto 'salud' al 'rendimiento'. El jugador profesional puede decidirse por tacos mixtos para evitar resbalar ante un césped húmedo, siendo un ejemplo de priorización del rendimiento», ilustraba en 'Radio Marca' el podólogo Javier Alfaro Santafé, que en 2010 empezó a trabajar en el Servicio de Biomecánica y Podología de la selección española. «Al ponernos de pie sobre unas botas de tacos, hay puntos de presión muy concretos sobre cada uno de ellos, por lo que una bota inadecuada puede provocar desde lesiones tipo hiperqueratosis (durezas), problemas de inestabilidad con riesgo de esguinces, hasta fracturas por estrés», añadía.
La elección del taco es fundamental para Argensó, que lleva incluso la decisión al fútbol formativo: «Ahora hay tacos en forma de raya, en 'V'... Necesitas un taco redondo para que el pie también gire. Nunca he visto tantas lesiones de niños como ahora. Antes no había lesiones tan gordas de tobillo y rodilla». Y verbaliza en voz alta una idea que ronda en muchos hogares. «Odio el fútbol moderno. Hoy en día, si eres jugador y no vas con botitas de colores no vales, si eres entrenador y no vas con ordenador, no vales… Hoy la gente está más pendiente de cómo va a quedar en la foto sin pensar en lo que sus pies necesitan de verdad para rendir adecuadamente y no lesionarse. El modernizarse, a veces, nos complica la vida».
Otros factores
Hay estudios que demuestran que una mala elección de la bota puede provocar lesiones de rodilla, como por ejemplo roturas de ligamento cruzado anterior o menisco, causadas por momentos torsionales de la extremidad bloqueados por los tacos excesivamente anclados al césped. En el pie se producen lesiones por inestabilidad, como esguinces de tobillo, o lesiones por falta de amortiguación, como los edemas óseos. Un dato muy característico y fundamental dentro de este tipo de calzado es tanto el número de tacos como la forma que tienen. «Cuanto mayor es el número de tacos, más y mejor se reparte el peso del cuerpo y menos puntos de hiperpresión aparecerán», según aseguraba Alfaro.
No obstante, la mala elección de tacos en las botas no es el único motivo de la gran cantidad de lesiones que asolan actualmente a los equipos de Primera división (46 musculares y 27 ligamentosas). Julio Hernando, preparador físico de Deportivo, Real Valladolid o Albacete lo tiene claro. «El aumento lo achaco fundamentalmente a una clave: el ritmo de juego. El ritmo de ahora es totalmente diferente al de hace treinta años. Entonces se jugaba a otra velocidad. Si aumentamos el número de partidos y la velocidad, es la pócima ideal para que el mecanismo lesional aparezca», explica a ABC.
Hernando, que fue pionero en la inclusión de la figura del readaptador, defiende el trabajo que se hace desde la preparación física: «Ahora hay un trabajo pre y post. Preentreno, preactivación y postentreno enfocado a reducir el número de lesiones. Eso antes no existía. El jugador venía media hora antes, se cambiaba, se entrenaba, se duchaba y se iba. El más profesional le dedicaba algo de gimnasio un par de días a la semana. Nosotros tratamos de cambiar esto y a día de hoy está totalmente establecido. El futbolista te demanda trabajo preventivo para evitar esas lesiones». Pero lamenta: «Hay un aumento de medios, de horas a prevenir, de horas trabajando con el cuerpo del futbolista y aún así el número de lesiones está ahí. Hay que seguir buscando. Hay causas intrínsecas de la propia dinámica del juego, de la intensidad y del número de partidos…».
Hernando también pone el foco en las pretemporadas: «Un clásico en pretemporada sigue siendo un clásico y hay orgullo y mucho en juego. A un jugador que viene de la playa, meterle a ese estrés sin un trabajo previo… cuidado. Hay riesgo de lesión y el porcentaje aumenta. ¿Es salvaje? Para pagar los contratos que rondan en el fútbol hay que hacerlo...».
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